6 de agosto de 2015

Costuritas

Coser es para mí, una especie de poder saber que puedo crear cosas por mí misma, y al mismo tiempo relajarme, cuando coso me puedo meter en lo que hago por horas y horas y querer estar más, solo cuando mi cuerpo me reclama, porque me cansa la silla o me duele la espalda un poco, o de plano tengo que hacer alguna otra cosa o me llaman mi bebito o mi esposo.
También significa hacer cosas con mi mamá, aunque no cosa junto a ella, siempre hemos tenido esto en común, desde que ella me enseñó siendo yo aún niña, y es algo que siempre voy a tener, que cuando coso es como si mi mamá estuviera ahí J conmigo, diciéndome como. Ni siquiera recuerdo si estaba aún en la primaria o el 1ero de secundaria, solo recuerdo que de entrar al taller de corte y confección de la secundaria me parecía muy aburrido porque 'yo ya sabía'.
Más grande cursé la carrera de Arquitectura, lo cual, cuando ella dice que la carrera me ayudo para entender mejor las cosas de patrones y los cortes, yo le digo a mi mamá que 'no sé si fue primero el huevo o la gallina', es decir, no sé si mi carrera me ayudo a mejorar mis cosas en la costura o si saber cosas de patrones me facilitó algunas cosas en la carrera. Siempre será para mí un misterio sin resolver.
Otra cosa que me encanta de coser es que lo que haga lo puedo hacer a mi medida o a mi gusto, ya sea ropa o cualquier cosa, por ejemplo que la ropa tenga tus mismas curvas, y te queden 'exactas' a la forma de tu cuerpo, o poder resaltar las partes que quieres o disimular las que no te gustan, o hacer una cortina simplemente con el detalle que quieres para tu sala o tu recamara, o la cosmetiquera con la cantidad de bolsitas igual a toooodo lo que tienes de maquillajes y que nunca alcanzan, o el vestidito para tu nena o la camisita para tu bebé con la misma tela que tu vestido (eso me encanta) y poder mezclar estilos y formas, texturas y colores a todo lo que dé tu imaginación.
Esto es algo que siempre me ha gustado tanto que ocupa buena parte de mi vida, y no me puedo imaginar de otra forma que, si Dios me lo permite, llegar a viejita y estar cosiendo. Y me encanta cuando llegan alumnas nuevas a clases con esa inquietud de querer aprender, cuando platicando coincidimos en que no sabemos si con este gusto se nace o se hace, generalmente a quien le gusta la costura, le gusta alguna otra cosa ya se artística o manualidades, cosas que van de la mano. Yo en lo personal creo que la sensibilidad se trae de nacimiento, y ya en el camino se va perfeccionando, por decirlo de alguna forma, y se va mezclando con otras artes. Por decir, es muy común que entre las alumnas haya quienes han tomado clases de repostería o decoración de la misma, de tejido, de bisutería, de pintura, chicas que son diseñadoras gráficas, industriales, arquitectas (como yo), o alguna carrera relacionada de algún modo con cualquier tipo de creación, y un sinfín de cosas que desborden sensibilidad.
Hay también quien se acerca al mundo de la costura por curiosidad, por entretenimiento o por alguna razón diferente cualquiera, y se puede descubrir en el camino ese gusto por este arte del que ni siquiera se habían imaginado.
En fin, coser es como hacer en cada proyecto de confección como un pequeño mundito, donde dejas toda tu imaginación, y aunque por muy simple o sencillo que sea, también dejas en ello todo tu cariño.
 Cosan, cosan, cosan... :-)

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